La humillación del prójimo como modus vivendi
Hola, Hoy ha sido un gran día, hoy he tenido la gran fortuna de ser uno de los agraciados con la decisión arbitraria de uno de los guardias de seguridad del aeropuerto de Miami, que me ha enviado a seguir la famosa línea roja. Para los que no hayan tenido tanta suerte como yo, o los que no conozcan el aeropuerto de Miami, la línea roja en cuestión es una línea de puntos rojos justo a la salida de la recogida de equipajes. En ese lugar, el último control de salida del aeropuerto, unos guardias te preguntan por enésima vez quién eres, porqué estás allí, dónde vas, con qué dinero, para qué viajas, cuál es tu ocupación, si estás casado o soltero, y si viajas, o no, con tu familia. Tras este interrogatorio (que no es el primero) deciden si te dejan marchar libremente tras la línea de puntos verdes, deciden que pases tu equipaje por el escaner al final de la línea de puntos amarillos, o bien eres un posible delincuente y tu destino es cruzar por los topos rojos. Esta suerte está destinada pr